Ladronas de Esperma

Ladrona de Esperma sic: Se hace referencia a un prototipo de mujer  oportunista, una variante de gato, que busca candidatos con dinero para quedar embarazada y explotar la paternidad involuntaria de su víctima para, so pretexto de mantener a su prole, vive de las regalías del padre de su prole. Si este (el hombre-victima) niega mantanerla, esta se buscará un abogado carancho para iniciar un juicio de alimentos y paternidad. Si el hombre-victima es mediático o famoso, lo extorsiona con "quemarlo" en público en programas chismenteros de Canal 9 o América TV. 

En esta argentina con alto nivel de tolerancia a la corrupción, ha quedado verificado que las mujeres gobernantes (gobernantas según Cristina ) de origen peronistas son no solo un fracaso, sino que sus gobiernos son un fracaso económico y político rotundo. Pasó con Isabel Martinez, pasa ahora con Cristina Fernandez que repite los graves errores de su predecesora. Pero la peor consecuencia es crear leyes (aprobadas por la mayoría automática K), que bajo la buena intención de la igualdad (el camino al infierno está sembrado de buenas intenciones) han fomentado la aparición de abusos e injusticias, ya que siempre nos olvidamos que los beneficiarios son argentinos y ellos también tienen vivesa criolla. 

Una nueva especie de engendro K que se beneficia con este injusto sistema legal creado por los políticos K es la ladrona de esperma. Chicas de interior del país o el cono-urbano capitalino, que pululan en discos de onda a la captura de una victima. Son chicas muy agresivas sexualmente para llamar la atención de futbolistas famosos o algún chico rico con mentalidad idiota, que suponen saberlo todo referente a la noche pero sucumben ante los encantos de la ladrona de esperma.

Hay dos casos documentados por confesión de parte, donde estas ladronas hasta incluso han buscado semen en los preservativos para auto inseminar se y quedar embarazada. Bajo tale circunstancias las víctimas poco defensa tienen si dicen que se cuidaron, y menos si intentan defender su inocencia. Pues la victimaria suena mas creíble a esta falsa sociedad machista con ribetes de hipocresía feminista que el hombre-víctima; pues salvo que confiese la victimaria, la víctima está desprotegida jurídica y socialmente, con peligro de ser tildado de "poco hombre". Típica frase de hombres convencidos de que lo correcto es la hipocresía feminista.