Salvo que ocurra algo raro, en el senado se rechazará el mamaracho que es la ley de aborto aprobada por la cámara de diputados. Una ley impulsada por una minoría verde que responde a fomentar la división de la argentina bajo falacias de falsas dicotomías, como "aborto legal o clandestino", "los que no apoyan la ley están a favor del aborto clandestino", etc. Pero analicemos que busca esta ley:
- Busca debilitar el apoyo al gobierno de Macri, pues en razón de la verdad, si los verdes ganasen la mayor parte de la clase media que apoyó a Macri en el 2015 y el 2017, estaría desilusionados. No apoyándolo en el 2019. En cambio la mayoría de los verdes nunca votarían a Macri.
- El negocio de las clínicas no confesionales. Como los hospitales públicos son incapaces de realizar abortos bajo condiciones de salud. Estos se harán en clínicas privadas y lo peor pagado por el estado, pues el estado debe pagar el aborto de una chica pudiente cueste lo que cueste.
- El negocio de los fetos. Los fetos no son tratados como cadáveres, sino como residuos patológicos, que puede ser vendidos a la industria farmacéutica.
- etc.
Ademas comparemos el mamaracho presentado con otra ley similar:
Vamos ahora a los aspectos morales y jurídicos de los abortistas. Para ellos:
- Para las abortistas el feto no es un ser humano, toma derecho a partir del momento que nace. Antes de este es "como si fuera parte del cuerpo de la madre".
- Para las católicas que apoyan el aborto, son parte de la hipocresía religiosa que ha existido, pero por una cuestión de lógica: No se puede ser católico practicante y estar a favor del aborto. Al mismo nivel de sofisma (lícito en un discurso político) Estoy en contra del aborto por eso pido su legalización. Es como decir estoy en contra de la drogas pero pido su despenalización.
- etc.
Lo que se busca es ponderar lo derechos de la mujer feminista por encima de cualquier otro derecho, todo un acto fachista.
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